SADHUS: los ascetas de India
En India es normal encontrarse con los sadhus, hombres, muy rara veces mujeres, vestidos con túnicas naranjas, otros casi desnudos y pintados de blanco con cenizas.
Quien no los conoce puede fácilmente confundirlos con mendigos, sin saber que son las personas más respetadas y sagradas de India.
¿QUIÉNES SON LOS SADHUS?
Sādhu, que proviene del sánscrito, significa “buen hombre”, “hombre santo”. Son personas que han decidido seguir el camino de la renuncia cortando con todos los vínculos que los unían al mundo material y terrenal, lo que implica dejar atrás a sus familia, sus trabajos y propiedades, e incluso sus nombres.
Los sadhus son tan antigüos como el hinduismo, en cuyo sistema de creencias distingue cuatro fases de la vida: la infancia y adolescencia que es la de formación, la madurez donde se forma una familia, la etapa de peregrino que coincide con haber cumplido con las obligaciones anteriores, y una última etapa que es el ascetismo para alcanzar la iluminación.
Un sadhu es alguien que guiado por un llamado interior sigue el camino para alcanzar el estado de iluminación y liberación (el "moksha"), para lo cual deben alejarse de deseos terrenales y ejecutar buenas acciones.
Cariñosamente la gente les llama Baba, “padre”, “hombre sabio”, como forma de demostrarles respeto. Ocupan un lugar de mucha importancia en las aldeas y pueblos pequeños.
Se calcula que hay unos diez millones de sadhus en India, de los cuales la amplia mayoría son hombres, a las mujeres se les llama sadhvis, y generalmente han elegido este camino luego de enviudar.
Se los ve habitualmente a orillas de los ríos, en festivales religiosos y en lugares sagrados como Gangotri o Varanasi. Muchos viven completamente aislados, en cuevas en las montañas o bosques.
El movimiento constante es parte de su vida porque consideran que la permanencia en el mismo lugar los vuelve inactivos.
CONVERTIRSE EN SADHU
Alguien que ha decidido convertirse en sadhu, deberá procurarse un gurú (maestro) que lo acepte y del que aprenderá hasta estar listo y seguir por sí mismo, esto llevaa unos dos años. En una primera etapa, el discípulo realizará tareas serviles, desde la limpieza hasta la cocina, a la vez que se inicia en el conocimiento espiritual, en el yoga y la meditación.
Durante ese período de servicio el gurú irá evaluando si su alumno está preparado para seguir adelante en esa forma de vida. Cuando el gurú entiende que ha llegado el momento, le otorgará un nuevo nombre mediante una ceremonia de iniciación. A partir de allí el nuevo sadhu deja atrás su pasado y comienza su nueva vida.
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Los sadhus provienen de diferentes entornos sociales. Algunos han vivido en entornos desfavorables desde temprana edad, mientras que otros han dejado dinero y posiciones sociales importantes. Entre estos últimos se encuentra Baba Ashutosh quien pertenecía a una familia acomodada de Varanasi, completó la universidad en Alemania para comenzar con su propio negocio. Pero la repentina muerte de su padre lo llevó a repensar el propósito de su vida y a cuestionar el modelo de sociedad en que vivimos para tomar posteriormente la decisión de dedicar su vida a la espiritualidad y la autodisciplina.
Hans Hablützel se convirtió en Swami Jnanananda , de origen suizo, había estudiado en un prestigioso internado y su madre quería que se dedicara a la banca. Tras una experiencia mística en Suiza, decidió emprender un viaje espiritual a India del que nunca más regresó. Vivió en completa austeridad. En el 2016 falleció en la ciudad de Dehradun, a los pies del Himalaya, su cuerpo fue enterrado en posición de meditación, sentado, como lo pide la tradición para los Swami, el título religioso hindú que obtuvo.
La sadhvi Bhagawati Saraswati creció en Hollywood, se graduó de la Universidad Stanford y completó su PhD en Psicología, cuando en 1996 se mudó permanentemente al Parmath Niketan, un famoso ashram en Rishikesh. Enseña meditación, se dedica a una fundación donde provee de educación gratuita a mujeres y niños en situaciones vulnerables.
LA VIDA DE UN SADHU
Un sadhu comienza su día antes de la salida del sol, con un baño de purificación en un río, luego del cual se reúne con otros sadhus alrededor del dhuni o chimenea sagrada, y comienzan con sus oraciones y meditación por el día.
Son vegetarianos estrictos, no beben alcohol, aunque sí fuman hachís, según ellos les permite una conexión más directa con la energía superior y enfocarse en la meditación. Han tomado votos de castidad y de renuncia a cualquier tipo de placer material. Se someten a duros ejercicios para dominar el cuerpo y liberar la mente.
Viven de la caridad, ya que ayudarlos se considera un acto de mérito. Es así que la gente del pueblo les proveerá de comida. Los sadhus retribuirán mediante ceremonias y servicios espirituales, incluso viajando grandes distancias para ayudar a otros.
En India tienen pase gratuito en todo el transporte público de todo el país y las personas les ofrecerán un asiento en el bus o en el tren.
Incluso el gobierno de India les permite mencionar al gurú como padre, al momento de completar los datos filiatorios, como por ejemplo en el pasaporte.
TIPOS DE SADHUS
La mayoría se identifican con uno de estos dos grupos: Shaiva sadhus, devotos de Shiva y los Vaishnava sadhus, dedicados s Vishnu.
Sin embargo, más allá de esos dos grandes grupos hay distintas doctrinas y órdenes. Están los dandis, los guerreros nagas, los aghoris, los más extraños y temidos.
Para conocer más sobre los sadhus te invitamos a ver los siguientes videos.